El valle de la Fueva

UN VALLE POR DESCUBRIR
El Valle de La Fueva se encuentra situado en un enclave privilegiado de la Comarca de Sobrarbe, muy cerca de la Comarca de La Ribagorza y a tan sólo 11 km de la villa medieval de Aínsa.
Su especial ubicación le permite considerarse una zona desde la que es fácil acceder a los rincones y lugares más emblemáticos del Pirineo aragonés, como el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, el Parque Natural Posets-Maladeta y El Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, así como a las pistas de esquí de Cerler, Piau Engaly o Saint Lary, en la vecina Francia.
El valle de La Fueva mantiene su frescura de tierra virgen gracias a su carácter de hoya o “fovea” (de ahí su nombre), cubeta natural rodeada de estribaciones prepirenaicas, que constituye una auténtica subcomarca situada entre La Ribagorza y la propia comarca de Sobrarbe a la que pertenece, dos entidades comarcales herederas de los antiguos condados altomedievales.
Todo el territorio del valle está drenado por el río La Nata, cuya cuenca da lugar a la Fueva Alta y los barrancos de la Usía y del Salinar, afluentes de la margen izquierda del Cinca. Con una extensión de 230 km2, el valle comprende 25 núcleos habitados que se sitúan entre los 620 y los 834 metros de altura sobre el nivel del mar, -si exceptuamos Troncedo que, con sus 1008 m. de altitud, constituye el pueblo más alto de cuantos pertenecen al Valle de La Fueva-, disfrutando todo el año de un clima templado y suave, lo que permite su visita en cualquier época.
El valle de La Fueva, cuya actividad económica principal es la agricultura y ganadería, a la que se ha dedicado desde siempre, en la actualidad da importancia a otra actividad considerada como secundaria pero que es fundamental para la economía de la zona: el turismo rural. Sus habitantes de carácter independiente y abiertos al trato, conservan el “fobano”, como lengua del país.